«¡Nuestra relación bilateral queda cimentada!», exclamó un feliz secretario de estado, David Bernier. «Para todos los haters del Estado Libre Asociado, les debe saber a mierda que los representantes de este gobierno estarán en el mismo cuarto con los representantes de la metrópoli, calladitos en una esquina, implementando las medidas austeras que les dicten los amos. ¡Albricias! ¡En verdad es bien liberante cuando sabes que tu rol es callarte la boca y hacer lo que te digan qué hay que hacer!», celebró.
El gobernador Alejandro García Padilla declaró que está bien con el acuerdo, siempre y cuando lo dejen frontear con que cualquier acción adversa es resultado de enemigos de Puerto Rico de los cuales nunca se dejará amedrentar.