«Muy bien dicho, súbdito mío», declaró Trump a la prensa, mientras las rodillas de Rosselló quedaban pelá’s a hueso vivo. «La respuesta del pueblo de Puerto Rico a mis acciones y presencia ha sido la mejor, la más maravillosa. Esta gente, tan tremenda, la mejor, saben que la prensa fake ha hecho de esto una gran tragedia al atacarme a mí. La gente de Puerto Rico está bien, muy bien. Tienen los mejores papeles toallas, bien suaves, algo que la prensa fake nunca informa. Gracias a Puerto Rico por su apoyo en este tiempo tan difícil para mí, creado por esta tormenta que les pasó encima a ellos. Tan tremendo, tremendo esto», aseguró, al tiempo que Ricky Rosselló le lamía los zapatos.
La Casa Blanca anunció que Trump podría dejar de estar hablando sobre Puerto Rico en las próximas semanas, porque se estaba concentrando en la inmensurable tragedia de que la prensa lo ataque por mostrar cero empatía a ÉL ante la muerte de cuatro soldados en Nigeria.