«Esta decisión valiente de pagarle a poderosos bancos e inversionistas, excepto estos bonos usados para proyectos locales que no tienen dónde pararse en corte, es solamente el primer paso de varios para ser mala paga mientras nos escondemos detrás de abogados para que no nos puedan llamar así», aseguró el gobernador Alejandro García Padilla, quien se encuentra bregando con una crisis que según él hace par de años ya estaba solucionada. «Así que cuídense, bonistas de tercera y segunda categoría: seguiremos inventándonos tecnicismos legales pa’ decir que no les debemos na’. Y a los grandes bonistas que sí nos pueden dar una pela en corte, es con entereza y valentía que les digo: ¿a dónde envío el cheque?», preguntó.
Se asegura que abogados del gobierno exploran la posibilidad de argumentar que cualquier deuda es técnicamente una obligación moral, así que no hay que pagar na’.