«‘Órale, manito, nuestros jefes de gabinete nos han confirmado que si seguimos vendiéndole hasta los calzoncillos a los mexicanos, para el 2023 todas nuestras agencias habrán pasado a manos purititamente mexicanas, wey», comenzó diciendo García Padilla con un peculiar acento mientras se ajustaba el vistoso poncho que utilizó durante la conferencia de prensa. «Ya nuestro aeropuerto es mexicano, nuestra televisión es mexicana, nuestra radio es mexicana y nuestra telefonía es mexicana. ¡Tan pronto completemos la venta de todo lo que nos queda estaremos listos para organizar los juegos! ¡El cielo es el límite!», exclamó visiblemente emocionado el Gobernador mientras hacía air quotes cada vez que decía la palabra «nuestro».
El Primer Mandatario reveló que la planificación del evento deportivo no es realmente un costo, sino una inversión, puesto que a pesar de que el gobierno deberá invertir 200 millones para completar los preparativos de la Justa, el resultado será una gran bonanza económica: «Habrá que presupuestar cientos de millones para construir villas olímpicas, facilidades deportivas, carreteras y hoteles. Afortunadamente tendremos suficiente cemento mexicano en el que invertir cantidades multimillonarias que irán a parar a donde sea menos aquí. ¿Quién sabe? Tal vez hasta logremos que la misma compañía mexicana que construyó el Choliseo nos construya par de estadios más», explicó García Padilla al abundar sobre el panorma altamente alentador que se avecina para todo el mundo menos nosotros.
En temas relacionados, el Gobernador rechazó que su determinación de no rescindir la transacción de la alianza público-privada del Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín contradiga su postura durante el pasado proceso eleccionario. «Yo no dije que las APP fueran malas; yo lo que dije fue que… ¡primero la gente! Si, eso», contestó García Padilla, citando una vez más su respuesta universal a preguntas sobre desempleo, economía, seguridad, educación, qué desayunó hoy, qué tipo de películas le gusta y básicamente cualquier otro tema durante la campaña. «En esta APP habrán cientos de empleos para puertorriqueños que no quieran alguno de los 10,000 empleos que la Asociación de Fast Foods va a crear. Eso demuestra que mi compromiso es con la gente», sostuvo el Gobernador, evitando hábilmente mencionar la frase «de México» en la oración anterior.
Al preguntarle si continuar con los planes de la pasada administración de vender toda agencia gubernamental mal administrada a precio de liquidación formará parte integral de su plan de trabajo para el presente cuatrienio, el Gobernador contestó que ese análisis se hará caso a caso de manera independiente. «Y cuando digo independiente, me refiero a que lo hará alguien totalmente independiente de nosotros; probablemente algún colmillú’ que quiera comprar a precios de quemazón agencias que tengan problemas de liquidez creados artificialmente para justificar la venta», explicó el Gobernador mientras etiquetaba la Autoridad de Energía Eléctrica, la Autoridad Metropolitana de Autobuses y la Corporación del Fondo de Seguro del Estado a precio especial en combo agrandado.
«Aquí lo importante es que no perdamos credibilidad ante la FAA, los bonistas, las casas acreditadoras, los empresarios gringos, los mexicanos… en fin: cualquiera que no sea el pueblo puertorriqueño», concluyó García Padilla con la convicción de que «credibilidad del candidato» está bien abajo en la lista de criterios que utiliza el sabio elector puertorriqueño al elegir sus gobernantes.