«Si eres mujer y vas a usar mi salón», advirtió el pastor Ávila, montándose en tribuna , «tienes que venir vestida como Dios manda — ¡literalmente! No uses pantalones lujuriosos, que eso lo que hace es incitar er Diablo en la mente der varón. Tampoco lleves er pelo corto, porque no hay nada más sensuar que una fémina que por detrás no se sabe si es hombre o mujer. Y por lo más sagrado, ¡no se te ocurra contradecir a un hombre, o tener tu propio criterio! ¡Mira que la mujer cristiana está enamorada de Jesucristo, y si no hace lo que Jesucristo dice, ér la va a dejar por otra jeva más recatadita!».
La senadora Kimmey Raschke Martínez indicó: «Es un gran placer para mí anunciar esta decisión del Senado de Puerto Rico de honrar al reverendo Yiye Ávila: no puedo pensar en nadie más apropiado para recibir esta distinción — ¡en serio, me acabo de teñir el pelo y apenas puedo organizar mis pensamientos! Lo que sí es que, a aquellos que se quejen que esto violenta la separación entre Iglesia y Estado que está consagrada en nuestra Constitución, simplemente les diré que eso no es algo muy cristiano de su parte».