El Gobernador no chistó en tomar «todas las medidas necesarias para sacar a Puerto Rico del primer lugar en el ranking de la tasa de desempleo de la nación: ¡o al menos las más fáciles!». El primer paso que tomó Fortuño fue «identificar a toda esta turba de bambalanes que se la pasan todo el santo día haciendo tres carajos y mancillando la imagen de mi Gobierno» — por lo que Fortuño evidentemente no se refería a nuestros legisladores, sino a los desempleados. El segundo paso fue buscar algún estado a dónde deportarlos «para que vayan a joderle las estadísticas a otro gobernador».
Un estudio preliminar de la lista de desempleados que fueron deportados a otras jurisdicciones reveló que los que se identificaban con el PPD fueron enviados a estados fríos e inhóspitos cuyos habitantes son famosos por tener demasiadas pistolas y muy pocos dientes; mientras que aquellos que pertenecían al PNP terminaron en estados soleados conocidos por sus playas y jóvenes atractivos con morales cuestionables. Interesantemente, muy pocos de los desempleados deportados se identificaban con el PIP, «porque estos pipiolos comefuego siempre tienen un guiso, ya sea haciendo esas camisetas de Albizu con el diente por fuera, vendiendo artesanías en las Fiestas de la Calle San Sebastián, o chupando de la teta de la Comisión Estatal de Elecciones».
Fortuño no descartó otras artimañas para mejorar la tasa de desempleo en la Isla, como por ejemplo inventarle segundos empleos a la gente para que puedan decir que tienen más de un trabajo, y así mejorar los porcentajes. «Esto es simple matemática, mis amigos», explicó el Primer Mandatario. «Luego de decirle ‘bye bye piojitos’ a los vagonetas del país, haremos que aquellos que tengan empleo puedan reportar más de un trabajo usando un poco de ingenio y jaibería boricua. Por ejemplo, un maestro de escuela podría decir que también es un ‘Baby-sitter de Manganzones Malcria’os’; un policía podría declarar que su segundo empleo es ser ‘Supervisor de Macanazos Estudiantiles’; y una secretaria de gobierno también podría declararse ‘Gerente de Bochiches de Oficina’. ¿Ya captan? ¡Menos desempleados + más empleos = #TRIUNFO!», aseguró el Gobernador.
Al preguntarle a Fortuño si otra manera de atacar la tasa de desempleo no sería fomentar la creación de empleos, este replicó: «Quizás, pero prefiero enfocar mis esfuerzos en algo que mi Administración sí sea capaz de lograr: ¡hacer que muchos boricuas cojan la juyilanga y se larguen de aquí!».