Gurabo, Puerto Rico – En un evento que seguramente ha sido celebrado con gran alegría por todo el pueblo puertorriqueño, el Gobernador Aníbal Acevedo Vilá festejó el pasado domingo su cumpleaños número 450, exactamente a un mes de haber celebrado sus 449 en un hotel de Mayagüez y sus 448 con un coctel privado en Carolina. La efeméride se celebró con una vistosa fiesta de pueblo en la que amigos y simpatizantes le regalaron poco más de $80,000 para su campaña a la reelección, y en donde el Gobernador aseguró que espera cumplir sus 500 años en algún momento antes de las elecciones de noviembre.
Un visiblemente emocionado Acevedo Vilá agradece de manera totalmente sincera a los presentes durante alguna de las treinta y siete fiestas de cumpleaños que ha celebrado en lo que va de año
Acevedo Vilá agradeció a los presentes por haber recordado su cumpleaños, a la vez que explicó la importancia que para él tuvo la actividad del domingo: «Me siento bien emocionado de que tanta gente se haya acordado de mi cumpleaños número 450. Este cumpleaños significa mucho para mí. Imagínense ustedes: ¿cuántas veces uno celebra su cumpleaños 450? ¡Eso sólo se da una vez en la vida!», exclamó el Gobernador, quien desde que se hizo candidato a comisionado residente en 2002 ha celebrado 410 cumpleaños, 330 de éstos en los últimos dos años. «¡Definitivamente esta muestra de cariño del pueblo popular me obliga a reafirmar mi compromiso de que, mientras haya gente que esté dispuesta a celebrar mi cumpleaños ocho veces al mes, continuaré cumpliendo años ocho veces al mes! ¡Sólo esperen, que la celebración de mis 500s va a ser por todo lo alto!», prometió Acevedo Vilá, mientras varios recolectores pasaban el cepillo entre los presentes.
El Gobernador aseguró que con la exitosa actividad queda comprobada una vez más la unidad que existe actualmente dentro del electorado popular: «La base del partido está hoy más unida que nunca antes. ¡Esto es prueba de nuestra capacidad para mover masivamente a todos esos buenos populares en una misma dirección!», dijo un efusivo Acevedo Vilá, en aparente referencia al movimiento de 100,000 electores populares que se afiliaron al Partido Nuevo Progresista para votar por Luis Fortuño en la pasada primaria de ese partido.
Por su parte, el director ejecutivo del Partido Popular, Aníbal José Torres, celebró el éxito de la actividad, a la vez que aseguró que la colectividad se encuentra en una magnífica posición de cara a las próximas elecciones: «Definitivamente ésta ha sido la mejor de las fiestas de cumpleaños que hemos celebrado, porque garantiza que podremos presupuestar más de esos importantes gastos de representación de nuestro siempre elegante Gobernador y su distinguida esposa. ¡Y qué bueno, porque ya Piti como que necesita darse una vueltecita por el beauty!», dijo Torres sobre la esposa de Acevedo Vilá, Luisa «Piti» Gándara.
Torres explicó que el Partido recaudó aproximadamente $80,000, a razón de $20 por plato, lo que implica una participación de al menos 4,000 personas en el festejo. A preguntas de El Ñame sobre la posibilidad de que dicha cantidad de personas cupiera dentro del pequeño, atestado y caluroso salón en que se celebró la actividad, Torres aseguró que la aparente contradicción era un mero reflejo de las preferencias gastronómicas del pueblo gurabeño: «Sí, este, lo que pasa es que, tú sabes, este… ¡Ah! ¡Es que la gente de Gurabo es bien esmayá’, y en vez de comprar un solo plato, ¡pues compraron como cinco cada uno!», explicó Torres. «Ahora si me disculpas, tengo otras gestiones que hacer. Cualquier otra pregunta que tengas, con mucho gusto mis ‘asistentes’ te la aclararán», finalizó el director mientras hacía gestos a dos guardaespaldas para que nos «asistieran».
Vista parcial de las 4,000 personas que asistieron a la celebración del domingo, lo que demuestra una vez más la capacidad organizativa del Partido Popular: o sea, no debe ser fácil meter 4,000 personas en un salón con capacidad para 200…
Sin embargo, justo en el momento en que los «asistentes» de Torres se disponían a «contestar» nuestras preguntas, el ambiente festivo que reinaba en el recinto fue interrumpido cuando algunos comensales, aparentemente confundidos porque la taquilla leía que el costo de la actividad era de $20 el plato, reclamaron que la comida que se les sirvió lucía sospechosamente como la que sirven en los comedores escolares del país: «¿Qué clase de atorrante sirve jamonilla con galletas Export Soda y una raja de piña por 20 pesos? ¡Si hubiese querido comer comida de comedor escolar hubiese ido a la porqueriza del compay Domingo!», exclamó iracundo el gurabeño Jaime Fonseca mientras miraba la bandeja de aluminio en la que le sirvieron sus manjares. Por su parte, doña Luisa Garriga, residente de Caguas, se mostró sorprendida y desilusionada con la pobre calidad de los utensilios que recibieron en la actividad: «¡A mí me dijeron que esto era a 20 pesos el plato! A mí que no traten de cogerme de zángana y que me den mi plato de’a veldá. ¡Veinte pesos cuesta un plato bueno en JC Penney, y a mí lo que me dieron fueron unas porquerías de platos de cartón! ¡Yo quiero mi plato!», reclamó doña Luisa, mientras los «asistentes» de Torres se movilizaban a su mesa para «contestar» sus preguntas.
Una vez restaurado el orden, Torres ofreció a los periodistas detalles de la cargada agenda de actividades del Gobernador para los próximos meses: «Luego de esta actividad, que como saben fue organizada espontáneamente por un grupo de servidores públicos que querían demostrar su apoyo incondicional al Gobernador, tenemos pautado un cumpleaños en Ponce, organizado por el Magno Grupo de Damas Popof de El Sur, otro organizado por la Orden de Caballeros de Porta Coeli en San Germán, y otro en Hormigueros que organizarán los Hermanos de la Monserrate, a quienes tenemos que avisar pronto, no vaya a ser no se aparezcan por allí el día de la actividad. Definitivamente se nos haría difícil explicar cómo recaudamos $80,000 en una actividad sin donantes», explicó Torres.
Al cierre de esta edición no habían sido confirmados rumores sobre la celebración del aniversario de bodas de la Primera Familia, alegadamente pautado para los meses de mayo, junio y septiembre.