«Es súper emocionante. ¡Qué grandes tiempos estos para estar vivo!», exclamó el doctor Ukufa Marwolaeth Moarte, uno de los científicos liderando el esfuerzo. «Que quede claro, estos cerebros no son reactivados al nivel de nada que se acerque a tener conciencia… ¡pero sus células están metabolizando! ¡Están en un estado entre completamente vivo o completamente muerto, cual político puertorriqueño! Hmm… esto suena familiar, pero no puede ser, porque esta es una investigación completamente original», explicó sin acabar de darse cuenta de que está describiendo cómo nacería el primer cabrón zombi.
Moarte explicó que la droga, que por nuestras madres se llama BrainEx, no tan solo suena como la droga que comenzaría el apocalipsis zombi en alguna película original de Netflix, sino que también podría usarse para resucitar a personas que antes se hubieran dado por muertas. «Imaginen: un familiar cercano con muerte cerebral hace más de 24 horas, le inyectamos nuestra droga… ¡Y abre los ojos! Imaginen la alegría que sentirán al abrazar a este familiar mientras este se acerca lentamente a su cuello… coño: ¿por qué dije eso? De verdad que siento como que he visto esa escena en algún otro lado…», meditó.
Moarte concluyó diciendo que eventualmente esperan poder desarrollar un método para distribuir la droga por algún método rápido y efectivo, probablemente por aerosol o mordiscos.