Aunque la formación de una nueva rama del ejército que se encargue de asuntos espaciales es algo que ni siquiera la misma Fuerza Aérea quiere, Trump siguió adelante con su deseo de crear la Fuerza Espacial (porque si él fuera a escuchar consejos de los demás, hace años se hubiera embarcado hacia el carajo en un viaje sin escala y sin regreso). Administradores en el ejército aseguran que la creación de una nueva rama sería costosa y complicada –y algo que no puede ser hecho unilateralmente por la rama ejecutiva–, pero no están muy preocupados porque «este el el juguetito nuevo y brillante de Trump hoy: ¡mañana se olvidará de este embeleco cuando alguna celebridad menor tuitee algo negativo sobre él y ese sea el nuevo enfoque de sus energías!».
«Esta es una idea genial, al igual que todas las ideas que he tenido, e incluso aquellas que nunca tuve», aseguró el siempre humilde magnate de bienes raíces / pila de mierda humana. «Es una vergüenza que los Estados Unidos, el mejor país en la historia del planeta que por alguna razón yo tengo que ‘volver a hacer grandioso nuevamente’, aún no tenga una Fuerza Espacial. ¡Tanto satélite allá arriba desprotegido, a la merced de que cualquiera de estos mexicanos criminales/violadores/algunos-buenos-supongo se les encarame encima! Por eso he destinado un fracatán y medio de dólares a la construcción de una muralla espacial alrededor de cada uno de nuestros satélites que los proteja de una ‘incursión marrón’, if you catch my drift…. I mean Mexicans!«, aclaró innecesariamente.
Por su parte, un inmigrante mexicano detenido por el Servicio de Inmigración aseguró: «La neta es que me vale madre lo que el pinche Trump haga en el espacio: yo lo que quiero es que me reúnan con mis hijos».