«En verdad crean lo que les dé la gana. Yo solo soy un pendejo doctor graduado de Columbia con una subespecialidad en enfermedades contagiosas de Yale y exoficial de la Organización Mundial de Salud», aseveró derrotado el director de la CDC, Tom Frieden. «No me crean cuando les digo que la única forma que esto se puede pegar es si entras en contacto directo con fluidos corporales de una persona enferma. Sigan creyéndole mejor a lo que se dice en la calle o a la muy confiable prensa, que para nada le está dando como a pandereta de aleluya al tema y creando controversia para generar ratings. Knock yourselves out!«, exhortó con gran frustración.
«¿Cómo es? ¿Que el gobierno de Obama se inventó el ébola para poder imponer la ley marcial y cancelar las elecciones? ¿Ah, que lo inventaron para engañar a la gente y así se vacunen de enfermedades comunes? Está bien. Seguro. Como ustedes digan. Sigan creyendo cualquier cosa que diga su celebridad o comentarista político favorito», prosiguió iracundo.
Este finalizó recomendándole al público que se compre una cajita de Airborne, ya que «si ustedes creen que la mierda esa protege contra el catarro, pues seguro, protege igual de bien contra el ébola».