El Premio Cantinflas se otorga anualmente al mayor exponente de lenguaje «ilógico e incoherente», y este año el galardón lo obtuvo la papeleta del plebiscito sobre el estatus, «por sus instrucciones contradictorias y pobrísimo diseño que prácticamente garantiza que sus resultados sean imposibles de discernir pero fáciles de tergiversar«. «De igual modo que el queridísimo comediante Cantinflas decía mucho sin decir nada», explicó Francisco «Paco» Juárez, presidente de la organización que otorga el dudoso homenaje, «esta papeleta le permitió a millones de puertorriqueños ejercer su derecho al voto sin que a fin de cuentas nadie supiera exactamente por qué votaron. ¡Este plebiscito no solo desafía el entendimiento, sino que logró incluso romper las matemáticas!».
La consulta consistía de dos partes: la primera, un «Sí» o «No», preguntaba si el votante quería que Puerto Rico retuviese el status quo; y la segunda le pedía al elector que indicara, irrespectivo de cómo hubiera votado en la primera pregunta, qué estatus prefería para la Isla. Eso forzó a las miles de personas que querían retener el Estado Libre Asociado a escoger entre la estadidad, la independencia o el «ELA Soberano» –que no es nada más que una «República Asociada» con un nombre más «populete-friendly«. Para hacer el asunto más cantinflezco, algunos líderes estadolibristas recomendaron dejar la segunda pregunta en blanco, mientras que otros instaron a los votantes a escoger el «ELA Soberano» (sin duda porque si tiene la palabra «ELA» en el nombre, ¡tiene que ser bueno!).
«Los resultados del referéndum apuntan a un claro, masivo y contundente apoyo a la estadidad», opinó predeciblemente el comisionado residente Pedro Pierluisi. «Es por eso que le envié una carta al presidente Obama explicándole que 54% de los puertorriqueños indicaron que no querían seguir viviendo en una colonia, y luego 61% de estos contestaron que querían la estadidad. Yo no sé mucho de estadísticas o matemáticas, pero 54% más 61% es 127%, lo que quiere decir que no solo todos los votantes actuales quieren la estadidad, ¡sino que 27% de los futuros electores también!». Aunque el Presidente aún no ha contestado la epístola de Pierluisi, fuentes dentro de la Casa Blanca aseguran que Obama ya la leyó, y que incluso la relee de vez en cuando cada vez que quiere reír un poco.
Por otro lado, el gobernador electo Alejandro García Padilla negó que el referéndum haya indicado una preferencia por la estadidad, señalando que al sumar el 46% de los votantes que eligieron mantener el ELA con el 26% que dejaron en blanco la segunda pregunta «se descubre un claro foquetazo al proceso electoral y, de alguna manera, un apoyo incondicional a mi candidatura». El nuevo primer mandatario aprovechó la ocasión para adelantar que tiene en la mirilla ganar el Premio Cantinflas en el 2013: «Llevo practicando por meses hablar sin decir nada en mis discursos, en los debates y cada vez que un periodista me hace una pregunta. ¡Cuando acabe mi cuatrienio en vez de ‘cantinflismos’ los llamarán ‘agapitismos’!».