Anchorage, Alaska – La Gobernadora de Alaska y ex candidata a la vice presidencia de los Estados Unidos, Sarah Palin, anunció durante este fin de semana que estaría renunciando a la gobernación de Alaska ya que siente que puede ayudar más a Alaska y a la nación fuera de la gobernación. Por otro lado, el vice gobernador, Sean Parnell, aseguró que esto solamente se trataba de Sarah Palin poniendo a Alaska primero, pasando a asegurar (por nuestras madres que esto no es relajo) que Palin era el regalo más grande que le podía dar Alaska a los Estados Unidos. Éste procedió a preguntar que a cuál estado le gustaría recibir el regalo primero, y hasta la hora de esta edición, no había recibido respuestas.


«Y aquí la tienen, empacadita y hasta con una florecita de adorno. ¿Quién se la quiere llevar? Se va a la una… a las dos… a las dos y medio… a las dos y tres cuartos… a las dos punto nueve nueve nueve nueve…», contó el vice gobernador de Alaska

«¡Oh! ¡Vamos! ¿Nadie quiere lo más grande que ha dado Alaska? ¿Ni siquiera uno de los territorios? ¡Puerto Rico, te hablo a ti! ¿No?», preguntó el vice gobernador Parnell. «Por si no entienden lo que se están perdiendo, déjenme reiterar: se están llevando a una mujer con extensa experiencia administrativa como alcaldesa de un pueblito con una población de 5,500 personas, y por supuesto, dos muy productivos años como Gobernadora de Alaska donde no tan sólo administró este estado magistralmente, pero también logró sacar tiempo para acomodarse en el balcón de su casa todas las noches y mirar hacia Rusia para velar que esos comunistas ateos no se pusieran guapos. ¿Nadie quiere este gran regalo? Vamos, el Partido Republicano claramente debe ver el valor de esta mujer. ¿Ni ellos se la quieren llevar?», cuestionó mientras el sonido de grillos retumbaba en la sala.

«Ok, sé lo que se están preguntando… ¿Qué puede hacer Sarah Palin para mi estado?», preguntó Paller retóricamente. «Aparte de la OB-via ventaja de que Rusia nunca se atreverá a invadirlos mientras ella esté ahí, estarían atrayendo gran publicidad que indudablemente ayudará a la promoción de su estado. Con una investigación ética en su contra, una riña pública con David Letterman, y una nena preñada fuera del matrimonio (y dos más que podrían quedar preñadas en el futuro), ésta traería una fuente de noticias faranduleras a nivel de Hollywood que estados tribilines como las Dakotas, Oregon, Arkansas y Mississippi podrían usar. ¡Y con un poco de suerte, tal vez ella le pegue cuernos a su marido trayendo todo el drama y cobertura que esto conlleva! ¿Nadie? ¿Todavía?», imploró algo desesperado.

Si aún no les interesa recibir el regalo de Sarah Palin en su estado, recuerden que ella ha sido todos estos años la primera línea de defensa de Estados Unidos contra Rusia. Casi podemos escuchar la canción de «America… Fuck Yeah!» al ver esta foto

Viendo que el teléfono no acababa de sonar con algún estado interesado con el regalo más grande que Alaska le puede dar a los Estados Unidos, el vice gobernador Paller perdió las casillas y exclamó: «¡Por el amor de Dios! ¿¡Por qué nadie quiere a una gobernadora que se raja después de menos de dos años de gobernar para velar güira por la presidencia!? ¡Eso no es un defecto! ¡Eso demuestra que ella sabe cuándo tiene que salirse del medio por el bien de un pueblo!». Luego de una pausa, añadió: «Ok, obviamente no estoy vendiéndola bien. Necesitamos ayuda profesional para vender a esta mujer. ¡Alguien consígame a Billy Mays! ¿Cómo que también se murió la semana pasada? Oh, come on! God damn it!«, exclamó frustrado.


Lo sentimos, vice gobernador Paller, pero ni Billy Mays hubiera podido vender a Sarah Palin como «el regalo más grande que Alaska le puede dar a los Estados Unidos»