«Ese demonio de Obama solo quiere joder a mi gobierno», aseguró Maduro. «Miren si está tan obsesionado conmigo, que apuntó todo el poder del aparato gubernamental estadounidense sobre mí en vez de sobre Donald Trump», señaló con algo de lógica el mandatario venezolano. «El punto es, que Obama ha logrado con sus poderes mágicos que yo asuma políticas económicas desastrosas para el país. Tiene que haber apuntado las antenas de HAARP a mi cabeza pa’ que yo tomara tan nefastas decisiones. Pero nada: ¡la revolución bolivariana continúa!», afirmó.
El presidente venezolano se despidió expresándose confiado de que a nadie en el mundo le va a importar un carajo Venezuela una vez Donald Trump sea presidente.