«¿No es claro que él es una de esas personas indeseables que votó abrumadoramente a favor de Obama en el 2008? No se parece en nada a nosotros, los miembros del Partido del Té. Me refiero a que es un riquitillo miembro de la élite de este país, por supuesto», aseveró Greg Harris, presidente del Partido del Té en Kentucky y miembro de la asociación de rifles de los Estados Unidos. «O sea, Sarah sabe muy bien que nosotros no podemos estar en el mismo cuarto con gente como él. En verdad yo me sentiría bien incómodo. ¡Jodí’os demócratas socialistas!», exclamó iracundo.
«Que relación más cochina», opinó Irene McCulkin, del estado de Misisipí. «Estoy bien desilucionada con Sarah: le quedó bien puerco. Ella sabe muy bien que este partido no toleramos que los nuestros se junten con los de ellos y mucho menos que pasen una noche juntos. O sea, se ve de una milla afuera que es un demócrata: ¡nunca tiene puesto un pin de los Estados Unidos en la camisa! ¡Qué día más negro es este! ¡Negro, Dios mío!», aseguró.
Sarah Palin reaccionó a la controversia asegurando que es una vil mentira que ella ya haya decidido correr para la presidencia de los Estados Unidos.