Washington, D.C. – El ex abogado personal de Donald Trump, Michael Cohen, se declaró culpable de mentirle al Congreso para proteger a su cliente, Donald Trump. La defensa del equipo de Trump es, por nuestras madres, que el abogado personal del presidente es una persona bien bien deshonesta cuando tan solo en mayo era un abogado era un abogado honorable y honesto. Esta estrategia se supone que es bien, bien brillante.
Trump se rodea solo de las más finas y lujosas personas deshonestas. [Imagen cortesía de LUY]
«Estamos seguros que siempre habrá una partida de pendejos que se creerán que el abogado que se jactaba de ser el fixer de Donald Trump era una rata deshonesta sin el conocimiento de Donald», explicó Rudy Giuliani, el senil exalcalde de Nueva York. «No será Robert Mueller, no será el juez, ni siquiera uno de nuestros propios abogados, pero lo único que necesitamos es uno que se nos meta en el jurado… ¡y esta brillante defensa rendirá frutos!», reclamó, y con una buena posibilidad de tener la razón.
Este periódico sabe que todos ustedes están caga’os porque saben que esta estrategia de mierda va a rendir frutos.