San Juan, Puerto Rico – La administración de Ricky Rosselló reveló un cambio en su plan de gobierno que pretende atajar decisivamente el problema del estatus, y simultáneamente mejorar la condición de vida en Puerto Rico: hacer que cada puertorriqueño que prefiere la estadidad escoja el estado de su preferencia y se mude a este.

«Estoy harto de estar mendigando la atención de un gobierno federal apático para que finalmente resuelva el sueño de millones de puertorriqueños de gozar de los beneficios de la estadidad», declaró airado Ricky Rosselló. «Ya tengo las rodillas pelá’s y la espalda to’a jodí’a de tanto pasármela de rodillas y eñangota’o buscando que alguna administración federal, demócrata o republicana, tenga el más mínimo interés en atender los problemas de Puerto Rico, mucho menos admitirnos como el estado número 51. Es por esto que mi administración empezará a realizar el sueño de todos los penepés desde tiempo inmemorial y traerles la estadidad que tanto añoran… ayudándolos a mudarse al estado que más les guste (¡preferiblemente a uno al norte de la línea Mason-Dixon, donde es menos probable que los linchen!)».

Mapa de los Estados Unidos

There really are 50 to choose from, guys…

«El eslogan de los pipiolos smart-ass hacia nosotros los estadistas siempre ha sido: ‘Si tanto quieres la estadidad, pues mira, hay 50 estados: ¡escoge uno y vete!'», explicó Rosselló sobre cómo llegó a idear este plan. «Y sí, yo sé que se trata de un troleo medio carnepuerco, pero luego de pensarlo un rato, me dije: ‘¿Y qué si tienen razón estos independentistas que dicen que los Estados Unidos están subyugando a Puerto Rico a pesar de que menos de 5% de los puertorriqueños quieren la independencia?’ Hablando claro, ¿por qué no es más fácil simplemente mudarnos nosotros, en vez de intentar jalar al gobierno federal por las greñas para que nos conceda la estadidad? Nada, me puse a hacer par de llamaditas y, si me salen bien par de chanchullos, podríamos conseguirles vuelos gratis a todos los estadistas (¡usando millas de viajero, claro está, porque seguimos pela’os, y la Junta no nos va a soltar ni un chavito prieto!)».

Rosselló aclaró que este plan también beneficiaría a los puertorriqueños que se queden: «Imagínense: ¡todos los melones en el PPD podrán finalmente salir del clóset, y el PIP sería por primera vez la mayoría abrumadora en el gobierno! Tendrían que ponerse a gobernar de verdad en vez de simplemente fiscalizar lo que hacen los partidos de mayoría, ¡a ver si es verdad que el gas pela! Con un gran porcentaje de la ciudadanía restante exigiéndole la independencia a los Estados Unidos, sin duda la lograrían: ¡por fin Puerto Rico podría ser el Edén de libertad e igualdad social que añoran los políticos que tanto loan los gobiernos de Cuba y Venezuela! ¡Eso lo quiero ver yo comiendo poscón tranquiléin desde Disney World, a media hora de mi condo en Orlando!».

En la propuesta del primer mandatario, todo estadista llenaría un formulario con el cual el gobierno sería capaz de determinar el estado que más le conviene a cada uno, en base a preguntas tales como:

  • ¿Cuánto odias la nieve, en una escala entre «Más que a Ricardo Arjona» y «Menos que a Hitler tocando la música de Ricardo Arjona usando una vuvuzela»?
  • ¿Cuán bien hablas el inglés, en una escala entre «Muy poquito» y «Para nada»?
  • ¿Por cuál otro tipo de hispano prefieres ser confundido por los blancos? (Favor elegir solo uno) ___ Mexicano ___ Dominicano ___ Cubano

Rosselló ya adelantó que él y su familia se quedarían en la Isla hasta que todos sus correligionarios hayan sido relocalizados al estado de su predilección: «No voy a ser como el sucio capitán ese del crucero Costa Concordia hace unos años, que se hizo el loco y se bajó con los demás pasajeros mientras el barco se hundía: ¡no me iré de Puerto Rico hasta que todos los demás estadistas se hayan convertido en otra minoría indeseada y estén rodeados de blanquitos que no los quieren ahí!».

Por El Rata