San Juan, Puerto Rico – En momentos que el gobierno de Puerto Rico se enfrenta a la hecatombe financiera más grande de su historia, el senado de Puerto Rico, dominado por el gobierno de turno, decidió tomar la única ruta sensible: desplegar el Arma de Distracción Masiva que es la ley del «Spanish Only«. El uso de esta arma delata la desesperación del gobierno para que la gente no vea la clavá’ épica que viene por ahí, dado que esto normalmente se utilizaría para panderetearle a los votantes melones cerca de las elecciones.

Esta es una imagen de cómo se vería la ley del Spanish Only si fuera una bomba. O podría ser de la quiebra del país si esta fuera una bomba.

«¡Aquí se habla español!», gritó desde su butaca en el Capitolio el autor de la medida, Tony Fas Alzamora. «¡Y funcionario que no haga caso y hable o escriba El Difícil, multa de mil quinientos a diez mil dólares! ¡Esto sí es legislación de altura en medio de nuestra gran crisis! ¡Crisis cultural! Me parece ver a un compañero periodista chequeando en su iPhone un artículo de negocios en Bloomberg que tiene ‘Puerto Rico Bonds Crisis‘ en su título. Mire, irrespetuoso: ¿usted no se da cuenta de que estamos hablando de nuestra cultura aquí? Por eso es que estamos como estamos, preocupándonos por dinero mientras nuestra lengua materna es masacrada. Esta legislación va pa’ la primera plana de las próximas dos semanas: ¿verdad?», preguntó ansioso.

Algunos analistas piensan que esta ley imbécil podría utilizarse para que cuando lleguen las cartas de cobro al gobierno de parte de los bonistas (asumimos que en El Difícil), la administración pueda responder con cara de lechuga: «No hablo inglés».