San Juan, Puerto RicoUna propuesta de ley en el Senado de Puerto Rico obligaría a aquellos artistas que tengan la intención de expresarse públicamente a primero solicitar una licencia de la Compañía de Turismo. Este permiso prevendrá que miembros de la clase artística puedan hacer actos indecentes en los espacios comunes, tales como estar al desnudo o criticar al gobierno de turno.

Un carnet de identificación para la clase artística

Próximamente quizás nuestra clase artística tenga que esperar horas en hedientes oficinas gubernamentales para sacar su «Carnet de Artista» oficial [Imagen suministrada]

La ley surge a raíz de una exhibición artística al desnudo el año pasado en el Viejo San Juan, por la cual fueron arrestadas tres personas por «exposiciones obscenas». La senadora estadolibrista María Teresa González, autora del proyecto de ley, explicó: «No podemos dejar en manos de la ciudadanía la decisión de qué es arte y qué tipo de expresiones se pueden hacer en público: claramente eso es algo que el gobierno tiene que regular. ¡Figúrate tú que en vez de simplemente haber estado posando en pelotas en la Plaza de Armas, esos dizque ‘artistas’ hubieran estado criticando la gesta de nuestro señor gobernador! ¡Eso no es arte na’, y lo puedo decir contundentemente yo porque soy una legisladora y ese es mi campo de competencia!», exclamó, aunque posteriormente fuera incapaz de mostrar evidencia de una sola instancia en la cual la legislatura haya sido competente.

Digamos que el hemiciclo del Senado aún no sabe exactamente qué es eso de «competencia» (a menos que nos refiramos a la competencia de quién es más bestia, claro está).

Bajo el nuevo reglamento, cualquier artista que pretenda manifestarse públicamente tendrá que someter una solicitud a la Compañía de Turismo para recibir un carnet de identificación que le permitirá expresarse en un espacio común sin que venga un policía a jeringar y hacerle pasar un mal rato. «Sé que sonaría más lógico que sea el Instituto de Cultura quien esté a cargo de expedir este permiso», explicó González, «pero yo quiero que sea la Compañía de Turismo aunque esta no tenga tres carajos que ver con el arte: bastante malas están las cosas en la Isla como para que nos arriesguemos a espantar a nuestros visitantes extranjeros con exposiciones artísticas potencialmente vomitosas… ¡O peor aún, que presencien alguna expresión de desapruebo o crítica contra nuestro gobierno! ¿Qué sería lo próximo? ¿Dejar que cualquier hijo de vecino diga lo que le dé la gana en la palestra pública y exponga su punto de vista en contra del partido que está en el poder? ¡No mientras la ley nos permita amordazar aquello que consideremos ofensivo!», tronó, intimando que su marca favorita de papel higiénico es «Constitución de Puerto Rico».

Por El Rata