San Juan, Puerto Rico – Un corre y corre fue lo que se formó ayer luego que el gobernador Luis Fortuño se diera cuenta que no había instruido que todas las transacciones del gobierno se hicieran de forma prudente. La situación se dio luego de que el gobernador expresara ayer que instruyó a que las transacciones del gasoducto se hicieran «de forma prudente» y este periódico le recordara que debería ser un dado que todas las transacciones del gobierno se hacen de forma prudente.

Gracias a Dios que tenemos un gobernador que instruye a sus subalternos que las cosas se hagan prudentemente. Bien vital que es esa función, porque si no nunca se haría

«¿No es esa una instrucción innecesaria donde usted se adjudica importancia de más? Es un dado que el gobierno haga todas sus transacciones de forma prudente», señaló este periódico cuando el Gobernador hizo la aseveración. «No: dar esas instrucciones no es solo necesario, sino que es incluso parte imprescindible de las funciones del Gobernador», empezó a contestar Luis Fortuño. «O sea, si yo no doy esas instrucciones lo que habría es un sal pa’ fuera y un derroche de malversación de fondos y corrupción. Es por eso que he impartido claramente esas instrucciones no tan solo en esta transacción sino en toda–… oh, Dios mío… ¡OH, DIOS MÍO! ¡NO!», gritó mientras corría hacia su oficina a hacer un número de «llamadas importantes».

«Esta es una muestra más de la ineptitud de la administración de Luis Fortuño», declaró en su página de Facebook el exgobernador de Puerto Rico por el PPD, Aníbal Acevedo Vilá. «Es OB-vio que esas instrucciones siempre se dan. Si lo dejas pasar una sola vez, es devastador el efecto multiplicador según la orden baja a los diferentes subalternos. Créanme, yo sé de eso: si hubiera recordado dar esas instrucciones a mi comité de campaña, ¡me hubiera evitado 24 cargos en el tribunal federa!», subrayó.