San Juan, Puerto RicoLucy García, la mocosáurica modelo apodada «Miss Coco» quien resultara ganadora de los certámenes Señora Islas del Caribe 2010 y Señora Piel Canela 2009, aseguró que su fuerza «se multiplica con las críticas» y que las burlas la «hacen poderosa». Estas aseveraciones fueron comprobadas luego de que, a solo par de horas que su historia saliera publicada en Primera Hora y miles de lectores se burlaran de su filosofía de vida y de sus fotos, Miss Coco se convirtiera en un ente súper poderoso y prácticamente indestructible.


Miss Coco, posando para la foto que causará tantas burlas como para concederle poderes sin igual [Foto de Pipo Reyes, para Primera Hora]

«¡Es culpa nuestra haber creado este monstruo!», aseguró un lector de Primera Hora mientras huía despavoridamente de Miss Coco, quien estaba destruyendo un automóvil con su mirada de rayos fotónicos. «Cuando leí esa totonada de que su misión en la vida era llevar un ‘mensaje de superación’ y luego vi las fotos de este adefesio, pensé: ‘¡Ella podrá superarlo todo, pero parece que sus muslos no pueden superar la celulitis, ni sus tetas pueden superar la gravedad!’. ¡Sin duda fueron esos comentarios tan catty los que terminaron de hacerla tan poderosa!», opinó, mientras Miss Coco aventaba una guagua contra un edificio y lanzaba llamas por la boca.


Parte de la destrucción que Miss Coco dejó a su paso luego de convertirse en un ser megapoderoso

En el reportaje, Miss Coco también intimó que admiraba mucho a Maripily, a La Taína y a Marjorie Núñez, lo cual levanta la interrogante de si habrá alguna mujerzuela flejetrónica que ella no considere digna de emulación. Sin embargo, es importante enfatizar que estos tres ídolos de Miss Coco no poseen su súper-poder de ganar fuerzas gracias a las críticas o las burlas: de ser así, expertos en el ámbito aseguran que ya Maripily se hubiera convertido en una poderosísima entidad de proporciones jenniffergonzalísticas que como mínimo hubiera destruido completamente el edificio de Primera Hora, y probablemente también los cuarteles generales de El Ñame.

Por El Rata