San Juan, Puerto Rico – En respuesta a la propuesta del Consejo Asesor de Reconstrucción Económica y Fiscal (CAREF) de imponer un centavo de impuesto por cada minuto de uso de llamadas celulares, la compañía telefónica Claro ha anunciado sus nuevos modelos de teléfonos portátiles consistentes de vasos unidos con cuerda, los cuales, a su entender, estarían exentos de dicho impuesto por no ser técnicamente teléfonos celulares.


La nueva maravilla tecnológica que te ahorrará 1 centavo por minuto, según Claro

«Si el nuevo gobierno quiere meterse a mono y sacarse nuevos impuestos de la manga», explicó Segundo Arizmendi, el Presidente de la compañía de telecomunicaciones Claro, «pues nosotros no podemos quedarnos da’os». Arizmendi explicó que el propuesto impuesto de un centavo por cada minuto de uso de teléfonos celulares le subiría el costo a sus usuarios hasta hacer del teléfono celular «prohibitivamente caro, y todos sabemos que si hay algo que el puertorriqueño no tolerará es gastar dinero frívolamente en algo de pura conveniencia cuando hay alternativas más baratas». Es por ese temor de que sus clientes abandonen por completo el concepto del teléfono portátil que Claro ha comenzado a sacar al mercado una sofisticada línea de telecomunicadores llamados «Vasófonos» que serán, según Arizmendi, «más cachendosos que el iPhone, y con mejor campo de cobertura… ¡aunque claro», rio, «eso no es mucho decir!».


«Deja nada más que las mujeres le cojan el piso al Vasófono», auguró Arizmendi, «que verás que no lo van a soltar ni en las cuestas»

La tecnología detrás del Vasófono, según Arizmendi, es «demasiado complicada como para tratar de explicársela a plebeyos como ustedes»; sólo reveló que entre el tecnológicamente avanzado equipo se encuentran dos vasos («ya sea de plástico o de aluminio, dependiendo de cuán estiloso quieras lucir»), y una cuerda de hilo («cuyo complicadísimo diseño está patentizado, así que no vayan a creer que es hilo de amarrar pencas o algo similar»). Además aseguró que la tecnología vasofónica «ya ha sido usada exitosamente en países donde no tienen dónde caerse muertos, y hasta ahora no se nos ha muerto ningún africanito de cáncer del cerebro, así que debe ser segura». Si bien el rango de comunicación fluctúa desde «unos diez pies hasta varios kilómetros (dependiendo de cuánto hilo compres)», Arizmendi aseguró que el Vasófono es «100% portátil, tiene cobertura en todos los lugares de la Isla, y mejor aún, puedes hablar en éste todo lo que quieras sin que el Gobierno venga a sonsacarte más dinero, porque no son teléfonos celulares. ¿Oíste, Fortuño? ¡Lero, lero, lero!».


Un africanito no muriéndose de cáncer cerebral al usar su Vasófono

El Presidente de Claro admitió que consideraron otras tecnologías de comunicación para sacarle el cuerpo a este nuevo impuesto a las llamadas celulares: «Por ejemplo, diseñamos un aparato que emitía señales de humo en distintos colores (por eso de fuera más chillin), y así facilitar la comunicación de un lado de la Isla al otro sin tener que depender de torres celulares, y le llamamos el Humófono. Desgraciadamente, tuvimos que suspender nuestras pruebas del prototipo por cuestiones ambientales». Luego de que los reporteros loaran la entereza de su compañía por abandonar un proyecto que atentara contra la salud de nuestro medio ambiente en vez de llenarlo de humo, Arizmendi respondió: «No, a nosotros no nos importaba el ambiente tres carajos: era que, con tanta contaminación que hay ya en esta Isla, nadie sabría distinguir los mensajes de Humófono con los desperdicios gaseosos de alguna compañía. ¡Figúrate tú qué pachó sería que tú vieras una humareda en el horizonte y creyeras que es tu chilla diciéndote que te la encuentres en el Executive en media hora, y que resultara que haya sido nada más que la Cemex botando polvo al aire! ¡Ahí cabría demanda!».


¿Una cita clandestina por Humófono, o una fábrica contaminando el ambiente? ¡Si no estás seguro, no arranques pa’l motel todavía!

Por su parte, el Gobernador de Puerto Rico, Luis Fortuño, adelantó que «no dejaremos que ésta, o ninguna otra compañía de telecomunicaciones, trate de cagar más arriba del culo para evitar pagar los impuestos arbitrarios que se nos ocurran. Si se creen que no encontraremos por dónde espetarles un impuesto con tal de salir del hoyanco económico en el cual nos encontramos, están tripiando en ketchup. He estado discutiendo con mis panitas del CAREF y creemos que se podrá poner un impuesto de un centavo por cada pie de hilo que usen en sus llamadas vasofónicas». Fortuño explicó que esa medida será necesaria dado que «Puerto Rico está en la prágana. Es más, estamos tan mal, que la gente que está en la Prángana parecen unos riquitillos guaynabichos guiando Mercedes y usando polos LaCoste comparados con nosotros».


«Me van a pagar ese impuesto, quieran o no», aseguró Fortuño entre dientes

Por El Rata