Nha Trans, Vietnam – Ingrid Marie Rivera Santos, la ganadora de Miss Puerto Rico 2008 que representará a la Isla en el concurso de Miss Universe a celebrarse este domingo, manifestó su descontento por que, a pesar de que el Gobierno de Puerto Rico costeó todos sus gastos de viaje, tuvo que volar a Vietnam en clase turista y no en jet privado, como ella esperaba.


Definitivamente ésta es la cara de una nena que no vuela coach

La beldad boricua, a dos días de ser la representante boricua en Miss Universe 2008 a celebrarse en Nha Trans, Vietnam, manifestó en rueda de prensa que estaba «encangriná’ de que los macetas del Gobierno no me hayan dejado venir a Vietnam en jet privado, como se merece una reina». A pesar de que el Gobierno sí le dio venticinco mil dólares para que ella costeara sus gastos de viaje y estadía, le negaron el uso de «Guagua Aérea Uno», el jet privado para uso exclusivo del Gobernador de Puerto Rico y altos funcionarios.


Guagua Aérea Uno surcando los aires; «Aunque sea una charrería total, un avión privado es un avión privado», aclaró Ingrid Marie [Imagen cortesía de 8PEX]

«Cuando Georgie me prometió que me iban a dar una potuca ‘e chavos, también me aseguró que me iban a dejar usar ‘Guagua Aérea Uno’ para poder así volar con estilo», se quejó Ingrid Marie, refiriéndose al Senador Jorge de Castro Font, quien fuera el que anunció el desembolso de fondos para los gastos de la concursante. «Como se pusieron con changuerías, no me quedó más remedio que volar en coach, entre la plebe, como si yo fuera pobre o fea, y para colmo en Vietnam Airlines, que es la aerolínea más cochambrosa que te puedas imaginar. ¡Si en American Airlines la opción de comida es entre pollo y lasaña, aquí fue entre carne de perro y carne de gato!».


Ingrid Marie Rivera siendo entrevistada por la prensa vietnamita, a punto de «decirle dos o tres a la reportera chinita esa sobre su porquería de aerolínea»

Por su parte, De Castro Font aseguró que indagaría por qué se le negó el uso del jet privado del Gobernador a la reina de belleza, «dado que Ingrid es como si fuera una alta funcionaria del Gobierno, que representa la belleza y el garbo de la mujer puertorriqueña doquiera que vaya. ¿Ya les dije lo increíblemente atractiva que encuentro a Ingrid Marie? Ella es preciosa: toda una mujer, con sus cara de ensueño, sus luengos cabellos, y su aguitarrada figura. ¡Qué mucho me gustan las mujeres a mí!», aseguró el Senador, y añadiendo posteriormente, por si las moscas, que él era «más heterosexual que Rock Hudson y Montgomery Clift juntos».


¿Jorge De Castro Font está admirando lo bellas que están esas rosas, o está ligándole las tetas a Ingrid Marie? You be the judge!

A pesar de la promesa del Senador, la modelo no se tranquilizó, sentenciando: «Déjenme decirles algo: si pasado mañana yo pierdo este concurso, no será porque me eslembé y no hice lo que tenía que hacer en tarima, o que me tropecé y me caí de culo, o que contesté alguna totonada en la pregunta final, sino porque no pude descansar tres carajos volando por veinte horas en una silla pequeña y apretá’. Y ni se diga que estaba rodeada de nenes llorando y viejas gordas y sudá’s con peste a sobaco de fritolera, de seguro porque lo que usaban eran marcas de desodorante baratas de ésas que venden en Pitusa, como Odorono y Ban. O sea, ¿por qué todo el mundo no puede usar Lady Speed Stick Morning Dew Fragrance como yo, para oler a aliento de querubín de sol a sol?».


«¡’Odorono Sí Responde’ my ass!», exclamó Ingrid Marie

Aunque la reina de belleza pudo haber usado parte de su estipendio para volar al menos en primera clase, ésta respondió que eso era «ridículo» porque «después de comprar los trajes, las carteras Louis Vuitton, y pagar la estadía en un hotel de cinco estrellas, apenas quedó dinero para el pasaje… ¡pero eso no hubiera sido un problema si estos lambíos me hubieran traído acá en el jet privado del Gobe!». Sumándose a los agravios sufridos, Rivera anotó que, al volar en un avión comercial, tuvo que someterse a su escrutinio de seguridad, razón por la cual se le prohibió subir a bordo con sus numerosos potes de maquillaje y de gas pimienta: «Yo nunca salgo de casa sin mi potecito de pepper spray: una nunca sabe cuándo tendrá que echarle fli a algún atorrante, o dosificar algún traje para hacerte la más sufrida y que te cojan pena. ¿Qué se supone que haga ahora? ¿Ganar a las buenas?».

A pesar de que manifestó sentirse «apenado» por el sufrimiento de la beldad boricua, el Gobernador Aníbal Acevedo Vilá dijo que no pudo prestarle «Guagua Aérea Uno» porque «ese avioncito yo siempre lo tengo lleno de gasolina y listo para el despegue, que el día que lleguen los Federales a llevarme a la cárcel yo cojo la juyilanga para Las Bahamas que me las pelo».

Por El Rata