Nueva Delhi, India – En respuesta a la reciente alza en el precio de la leche en la Isla, el Gobernador de Puerto Rico, Aníbal Acevedo Vilá, ha decidido unilateralmente invadir a la India, quien es casualmente el país número uno a nivel mundial en la producción de leche, en una jugada tomada directamente del libro de juego de George W. Bush. La desesperada movida del primer mandatario es diáfanamente una respuesta alocada a la crisis de la industria lechera del país, la cual ha tenido que subir el precio de la leche a cantidades nunca antes vistas.


«Ya esos indios están bajo aviso», sentenció el Gobernador; «Y esto será fuego a la lata, así que no vengan a usar las mismas mariconerías que Ghandi usó contra los británicos, que no les van a bregar»

«Compatriotas puertorriqueños», comenzó el Gobernador en una conferencia de prensa luego de haberle oficialmente declarado la guerra a India, «ya no podemos dejar que el régimen del Rajá Mahmamelabhemba (o como rayos se llame) de la India permanezca impune. Él tiene armas de destrucción masiva, y si eso no resultara ser verdad después de todo, pues también les digo que tiene a esos pobres indiecitos subyugados bajo un régimen draconiano el cual nosotros, como amantes de la libertad, tenemos que derrocar para defender la democracia hasta la última gota de sangre de personas que no son yo», añadiendo, «y sin en el proceso nos podemos quedar con par de sus pailas de leche, pues que así sea».

La decisión de Acevedo Vilá, aunque probablemente mal concebida y sin duda ilegal, goza con el respaldo de muchos puertorriqueños que están ya hartos de pagar casi cinco dólares por un galón de leche, haciéndola más cara que la misma gasolina. Doña Josefa «Fefe» Toro, oriunda de Barrio Obrero en Santurce, declaró: «¡Ya era hora de que alguien hiciera algo con esto del precio de la leche, aunque sea esta totonada de invadir a la India bajo pretextos fatulos! Mis nenes necesitan leche, y como ahora la gasolina está más barata que la leche, últimamente hemos tenido que echarle gasolina en vez de leche a los Corn Fleis de los nenes en el desayuno para ahorrarme par de pesitos».


«Miren cómo se ven los Corn Fleis de los nenes con gasolina», apuntó Doña Fefe; «Se verán feos, pero además de los vómitos que les dan después, no es tan diferente usar gasolina en vez de leche»

En efecto, la leche está ahora tan cara que los otrora adorados símbolos de nuestra industria lechera, la Vaca Denia y las Tres Monjitas, han tenido que sufrir el oprobio del pueblo. «¡Me cagüenná’!», declaró falta de aliento la Vaca Denia. «Ya estoy harta de tener una zafra de frescos trillándome pa’rriba y pa’bajo tratando de ordeñarme… ¡eso ya es acoso sexual!» Las Tres Monjitas, sin embargo, no siendo capaces ellas mismas de proveer leche, han sido víctimas de vituperios y amenazas por parte del pueblo. Sor La De La Izquierda dijo: «¿Qué culpa tenemos nosotras de la situación por la que está pasando la Isla en cuanto al precio de la leche? ¡Ave María Purísima, si nunca antes había escuchado tanta palabra soez dirigida hacia mi persona! ¿Y por qué exactamente me están llamando ‘tragaleche’ si precisamente el problema es que la leche merma?»; Sor La Del Medio añadió: «De cierto os digo que estoy hastiada de que los títeres del barrio vengan a quitarme mi capuchita y empiecen a jugar keep-away con ella: ¿qué relajito es éste?»; mientras que Sor La De La Derecha finalizó: «Esto está de pinga: yo mejor me regreso a los montes alpinos a buscarme a mi propio Capitán Von Trapp, porque aquí en Puerto Rico se están poniendo los huevos a peseta… ¡y lo digo literalmente!»


La Vaca Denia y las Tres Monjitas, símbolos lecheros víctimas del acoso y repudio del pueblo

Por su parte, el «Rajá Mahmamelabhemba» mentado por Acevedo Vilá, mejor conocida como Pratibha Devisingh Patil, la Presidenta de la India (dado que ése es su nombre y título verdadero), escuchó tranquilamente las aseveraciones del Gobernador, entendiendo de inmediato el transparente intento de éste de obtener leche del extranjero a como dé lugar. «Entendemos la gravedad del asunto de la carencia de leche en Puerto Rico», comenzó diplomáticamente Patil. «Claro, ¡si en Puerto Rico hicieran como aquí, que adoramos a las vacas como dioses y sólo las ordeñamos, en vez de comérnoslas para hacer bistec encebollado, quizás tendrían más leche que producir! Ahora, si el Gobernador lo que quiere es entablar conversaciones con nuestro gobierno para establecer un tratado de exportación de leche», expuso Patil, «no tiene por qué usar subterfugios: lo único que tiene que hacer es que su Departamento de Estado contacte al nuestro y … ah, pérate, si es que Puerto Rico no puede comerciar internacionalmente porque es solamente un territorio de los Estados Unidos», rio Patil con un tónico sardónico, añadiendo: «Suck it, bitches!«


La Presidenta Pratibha Patil, sentenciando: «¡Y como el puertorriqueñito feúcho ése se me alce, lo destruiré con el rayo mortal que emana de mi puntito rojo!»

Por El Rata